¿Qué es la leptospirosis? Riesgos para los perros

¿Qué es la leptospirosis y mi perro corre riesgo de contraerla?

La leptospirosis es una enfermedad que afecta no solo a los perros sino a muchos tipos de animales en todo el mundo. Está causada por un tipo de bacteria llamada espiroqueta. Existen muchas cepas de leptospira pero cuatro son las más comunes que infectan a nuestros perros:

• Leptospira icterohaemorrhagiae
• L. canicola
• L. grippotyphosa
• L. pomona.

Registros médicos de Jeffers

La leptospira se encuentra tanto en animales salvajes como domésticos. La mayoría de los animales infectados que transmiten la leptospira no parecen estar enfermos. Los animales con leptospira eliminan bacterias vivas en la orina. Esta bacteria suele llegar a las fuentes de agua y permanece infecciosa en el suelo hasta seis meses. Las ratas, el ganado, los mapaches, los zorrillos y las zarigüeyas son portadores habituales de la leptospira. Las espiroquetas entran en el organismo de un perro a través de una herida en la piel o al beber agua contaminada con orina infectada. Los perros que pasan tiempo en zonas boscosas o pantanosas tienen más probabilidades de contraer la leptospira que los perros que pasan la mayor parte del tiempo en espacios interiores.

Los síntomas suelen aparecer entre 4 y 12 días después de la exposición. La fiebre está presente en la etapa inicial. Otros síntomas son pérdida de apetito durante varios días, vómitos, letargo, depresión, dolor muscular y articular y, a veces, diarrea o sangre en la orina. La leptospirosis afecta principalmente a los riñones y al hígado. En casos graves, el blanco de los ojos del perro se vuelve amarillo (ictericia). Esto es indicativo de hepatitis con destrucción de células hepáticas. Pueden ocurrir problemas de coagulación con sangrado espontáneo por la boca y presencia de sangre en las heces. Debido a que los síntomas pueden variar entre mascotas y debido a que la mayoría de los veterinarios ven pocos casos, es común pasar por alto el diagnóstico de leptospirosis.

Los análisis de sangre pueden confirmar o descartar si su mascota tiene leptospirosis. El tratamiento suele consistir en antibióticos como penicilina, doxiciclina o tetraciclina y medidas de apoyo para controlar los vómitos y la diarrea. Los casos graves pueden requerir hospitalización.

Vacuna Solo-Jec 9

Limitar el acceso de su mascota al agua contaminada es la mejor manera de evitar la leptospirosis. Existen vacunas contra la leptospirosis, pero no están exentas de riesgos. La Asociación Estadounidense de Hospitales para Animales (AAHA, por sus siglas en inglés) considera que la vacuna contra la leptospirosis es una vacuna "no esencial" para perros. A menos que haya una buena probabilidad de que su mascota esté en riesgo, la AAHA no recomienda vacunar contra la leptospirosis. Las reacciones a esta vacuna pueden variar de leves a severas o incluso fatales. Consulte con su veterinario antes de administrar cualquier vacuna.

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Renee Jones-Lewis es una entrenadora de perros profesional certificada, que ha recibido instrucción de la especialista en comportamiento canino Dra. Pamela Reid, además de entrenadores aclamados a nivel nacional: Patricia McConnell, Pia Silvani y Jean Donaldson, por nombrar algunos. Se desempeña como especialista en marketing de mascotas y caninos para JeffersPet y JeffersPet.com. Si tiene preguntas sobre este artículo, el entrenamiento o inquietudes de salud que no sean de emergencia, no dude en contactar a Renee la mayoría de los días de 9 a. m. a 5 p. m., hora central (de lunes a viernes), al 1-800-JEFFERS (533-3377), ext. 381, o por correo electrónico a rsjones@jefferspet.com.

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